Las rimas endulzan versos y nutren sus letras con aquellos que saben del corazón y de las buenas almas. Este poemario llega a manos de Begoña, incesante buscadora de la magia que tenemos en el espacio de esta vida.
Gracias, querida amiga y sigamos buscando las buenas estrellas que iluminan la esperanza de este caminar...
Retengo el ímpetu esbelto
entre abrazos que callan
olvidando el tiempo
entre espacios de calma...
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